Matrimonios de color: ¡Las piedras preciosas y semipreciosas que querrás en las joyas de tu boda!

¿Habías pensado en piedras diferentes a los diamante o las perlas para tu gran día? ¡Aquí te contamos qué puede funcionar!

Los zafiros en anillos de compromiso los vi por primera vez en las manos de Kate Midletton y luego en las de Penélope Cruz, ellas fueron las que rompieron el paradigma para muchos que aprendimos en sus bodas que los diamantes no eran los únicos invitados a la celebración de una boda o a un compromiso. Ya sea que quieras el tradicional diamante o uno rosado como el del anillo de Blake Lively, está bien que tomes la decisión por las piedras con buena asesoría. Hablamos con tres de los más reconocidos joyeros en Bogotá y estos son los consejos que dejaron para ti.

El diamante

A diamond is forever, fue la contundente respuesta de Enrique Martínez Daza, gerente administrativo de Sterling Joyeros. Sin lugar a dudas se trata de la piedra más recomendada por los tres grandes de la joyería que nos asesoraron para este artículo. No se trata solamente de su simbolismo relacionado con el amor eterno, su elegancia o la transparencia que se funde con el blanco de los vestidos de novia. El elemento por el que más lo recomiendan es por su durabilidad, necesaria para una joya que vas a usar muy a menudo por el resto de tu vida.

Las cuatro grandes piedras

Sin embargo y como lo mencionamos en la introducción, otras piedras han tomado lugar en las manos de los protagonistas del gran día. Por lo regular, son apenas 4 las que alcanzan a involucrarse en este momento de la vida de los novios, ya sea por su belleza o por su durabilidad y que son reconocidas como las 4 grandes piedras en el mundo de la joyería: el ya mencionado diamante, el rubí, el zafiro y la esmeralda.

El zafiro

Después del diamante es el segundo gran preferido por las novias. Se trata de una piedra que, según nos explica Thomas Kling de Bauer, requiere cuidados mínimos, “su dureza alta y estabilidad química permiten el uso diario sin mayor problema”, nos explica. Además nos explica que por su color azulado, esta piedra encaja perfectamente en anillos de oro blanco o platino. Como el primero requiere un mantenimiento anual llamado rodinado, la recomendación es que optes por el segundo material.

El rubí

Por su rojo intenso es poco común verlo en los anillos de compromiso o argollas ya que no resulta tan fácil de combinar para el uso diario. Sin embargo y junto con las otras grandes piedras, sí es muy regular encontrarlo en las gargantillas o aderezos de las novias y por supuesto, haciendo presencia en el aspecto de los invitados que saben combinarlo con la ropa que han elegido para el gran día de sus seres queridos. En Joyería Liévano engastan un rubí en el interior de los anillos de compromiso, oculto a la vista, para desear un matrimonio próspero y feliz a los novios.

La esmeralda

De entre las 4 grandes piedras, estas son las que más cuidado precisan. Los tres profesionales que nos asesoraron nos invitaron a tomar en cuenta la importancia de evitar que sufran golpes, que les caiga agua o jabón, tenerlas en estuches especiales para joyas y evitar guardarlas con otras joyas para que no se rayen. Thomas Kling de Bauer nos explica que si el sueño de la novia es una esmeralda en su anillo, “es posible usarla con bisel alrededor, envés de uñas o un anillo más grueso y alto” que servirán para protegerla.

¿Piedras semipreciosas?

Lo escribimos entre signos de interrogación porque, además de que llamarlas de esta manera es una costumbre en desuso, vale la pena preguntarse si de verdad vas a quererlas en tus anillos. Si bien es cierto que la esmeralda, una de las 4 grandes piedras preciosas, requiere de cuidados importantes, es posible que estas piedras de color natural pidan todavía muchos más. La recomendación de los tres profesionales que nos asesoran es que si te decides por ellas, hables con un experto que te explique cuáles son los cuidados que van a requerir, antes de adquirirlas.

¿Cómo escoger?

La primera recomendación de estos tres profesionales es que pienses en tus gustos: ¿qué es lo que quieres? Camilo Liévano de la Joyería Liévano nos sugirió tres ideas para que puedas tomar una decisión final: Para él, la piedra debe cautivarte “la piedra debe deslumbrar y la primera persona fascinada con la misma debe ser quien la lleva puesta”, nos dice; además debe reflejar tu personalidad, ser una extensión de ti y por último debe influir positivamente en tu ánimo, “es lo que queremos con cada creación, que cuando vean sus joyas, se sientan especiales”, concluye.

Pero su principal recomendación es que busques el apoyo de un gemólogo experto, como los que vas a encontrar en todas las joyerías del Círculo Colombiano de Joyerías, a la que pertenecen las tres joyerías que nos prestan la asesoría de sus expertos para este texto y que tienen el enfoque de conseguir que toda persona que busque una joya en Colombia, la encuentre certificada y de la mejor calidad.

Enrique Martínez Daza, gerente administrativo de Sterling Joyeros, por su parte, nos recuerda 4 características que conviene tener presentes a la hora de enfrentarse a estas piedras. El color —en el caso del diamante debe ser incoloro—, la claridad, el peso y el corte que tengan, determinan la calidad de las mismas. No sobra repetir que serán más fáciles de identificar con la asesoría de un experto que además te puede decir qué tipo de cuidado requiere la piedra que escojas.

Ya tienes una buena cantidad de información para que escojas las piedras que le aportarán brillo y según tu decisión, también color a tu vestido de novia. Ten en cuenta que no tienen que ir solo en las manos y que no deben ser necesariamente perlas en otras partes del cuerpo. Esta época en el mundo de las bodas es quizá una de las mejores: las novias pueden realizar sus sueños sin amarrarse a reglas y eso incluye el color de las piedras. Es en últimas, lo que en tu gran día te mereces.

Fuente: Zankyou.com